Autor: SANDRA DE LA TORRE/Directora Creativa de TRESISMO
En los últimos años, las empresas mexicanas han identificado la importancia que tiene el diseño interior de sus espacios de trabajo, principalmente por los frutos financieros que genera al aumentar la productividad, pertenencia de los empleados, mejora calidad de vida y bienestar, el impacto en la imagen y como parte de la estrategia de mercadotecnia de algunas marcas. Aún así sabemos que algunas empresas siguen creyendo que el diseño de interiores de los espacios de trabajo es un lujo más que una necesidad, y esto sucede cuando se enfocan solamente en ver la parte creativa/artística.
El diseño de interiores de los espacios de trabajo debe de estar fundamentado en una investigación que incluye entender la marca a nivel visual y cultural, entender sus valores y analizar su capital humano (sexo, generación, gustos, estado civil, estatus social y requerimientos tecnológicos), para transformar la cultura organizacional en la forma de operar el espacio.
No es solamente una paleta de colores, o la inclusión de materiales y texturas en las paredes de la organización, se trata de crear una experiencia de diseño que reflexione sobre el impacto que tiene el espacio de trabajo en nuestro comportamiento. Incluye el mobiliario, la iluminación, la calidad del aire, los espacios que destinamos para trabajar, la tecnología, entre otros. A todo este ejercicio se le llama psicología ambiental. Con lo que hemos vivido en estos meses, hay muchos que han empezado a mostrar interés en cómo el entorno en el que trabajamos nos impacta en nuestra salud, comportamiento, productividad y bienestar. Al inicio se pensaba que, al adquirir la libertad de hacer home-office se incrementaría la productividad, y en el mayor de los casos ha sucedido, pero a costa de una pérdida de bienestar y salud, aumentando el nivel de estrés, ansiedad, cansancio y desgaste.
La psicología ambiental empieza a tomar valor para los inversionistas cuando transformas el diseño en ahorro de m2, aumento de productividad y reducción de rotación. En estos momentos críticos que estamos viviendo, nos corresponde a los que desarrollamos los proyectos de diseños de interiores, con una base profunda en investigación del comportamiento de los usuarios (psicología ambiental), aportar a México nuestro expertise y servicios, se requiere replantear las reglas en los espacios de trabajo. En estos momentos es prioritario el análisis de cada caso e involucrar a los expertos, porque somos los que sabemos cómo modificar las variables del entorno y tomar decisiones rápidas pero fundamentadas, que ayuden a mitigar gastos, lograr mayores ahorros y generar un impacto positivo en el colaborador.
Ante el contexto en que estamos viviendo, la psicología ambiental tiene más importancia que nunca, si bien es cierto que cada espacio tendrá que ser definido o analizado de manera particular, es importante considerar las premisas básicas que nos ofrece para asegurarnos que estaremos generando el impacto positivo que estamos buscando en la productividad y desarrollo del capital humano:
1.- Analizar TEST FIT vs OPERACIÓN actual.
El costo por m2 es muy caro, por lo que se tiene que analizar la forma de operar de cada cliente para re-plantear un proyecto de máxima eficiencia, logrando el máximo funcionamiento y capacidad de acuerdo a las necesidades particulares. Se tiene que analizar la planta arquitectónica actual, haciendo diferentes pruebas de la forma de operar en conjunto con el cliente, ya que los nuevos protocolos de trabajo definirán la forma de usar los espacios. Por ejemplo, sabemos que ya muchas empresas están analizando su operación, definiendo quienes requieren estar forzosamente en el espacio de trabajo, quienes de manera híbrida, y quienes no.
Es necesario revisar la frecuencia de las reuniones e interacciones entre los grupos de gente, cuales son necesarias o más productivas en persona, cuales pueden ser por videollamada, quienes requieren equipos particulares que compartir en las oficinas, quienes son personas vulnerables y de alto riesgo al contagio, y otras variables que no analizaron la primera vez que se diseñaron los espacios. Es bajar el alcance, necesidades, re-dibujar los procesos operativos, y re-definir el grupo de usuarios que ocupan el espacio. Se requiere hacer pruebas con los nuevos parámetros y códigos, para ver si existe forma de re-distribuir mobiliario, e identificar las zonas que quedarán inutilizables para aprovecharlas y mejorar la productividad.
2.- Re-plantear psicología ambiental.
El crear la psicología ambiental bajo una investigación detallada propicia la productividad y reduce la rotación del personal. Hoy en día es importante ser empático ante los miedos, problemas, realidades que viven las personas en los espacios de trabajo, por lo que requiere ser creativo para poder lograr mantener la psicología ambiental deseada. Se pueden brindar espacios seguros para dialogar, donde la disposición del mueble nos obligue a no tener que “concentrarse en alejarse” o tener que protegerse demasiado, sino que esté dispuesta para que nos obligue a movernos bajo esas reglas pero conviviendo.
Por ejemplo, en los espacios donde había mucha gente y conversación, y ahora son espacios vacíos, con tanta quietud que pudiera crear una emoción negativa en los colaboradores. Con la psicología ambiental se puede integrar sonidos/música, movimientos con la tecnología y pantallas, para crear puntos en donde se obligue a que las personas interactúen con las debidas medidas de higiene y salud. Esto tendría que ir de la mano con la operación, porque, aunado a los cambios en la dinámica laboral mejoraría el ambiente de trabajo.
3.- Mejorar los beneficios de cada espacio individual.
La rotación de personal tiene un costo demasiado alto que resulta difícil de cuantificar. Desde el tiempo de reclutamiento, capacitación, “onboarding”, afianzamiento, crecimiento, desarrollo, hasta el proceso de despido y entrega. Eso aunado a las pérdidas que genera un espacio que dificulta el funcionamiento o simplemente no potencializa como debería, son números importantes. En un espacio creado desde la psicología ambiental, se busca que cada persona reciba un beneficio en su ambiente de trabajo, a la par que se compensa lo que perderá con la nueva interacción de los espacios en esta nueva realidad.
Sabemos que ante estas situaciones difíciles estamos buscando mantener nuestros trabajos, pero la realidad es que también queremos que los mejores trabajadores se queden con nosotros, estos nuevos cambios hacen difícil que se sientan cómodos en sus espacios de trabajo. Es por eso que entre menos estrés sufra el trabajador, y más beneficios reciba en su lugar de trabajo, donde pueda fluir con facilidad y se enfoque más fácil en lo que tiene que trabajar, entonces estaremos propiciando su compromiso y productividad. Además recibirá una especie de “acompañamiento” y se sentirá protegido sabiendo que la empresa ve por él, a pesar de que pudiera haber más trabajo o más presión por otros lados.
4.- Integración de tecnología para mantener calidad de AIRE Y SUPERFICIES.
En toda la información que se tiene hasta ahora del COVID-19, sabemos que al ser un virus pesado, no puede viajar grandes longitudes. Pero en espacios en donde no existe la ventilación natural, la circulación que se genera por los equipos de HVAC ha impactado en la propagación del virus y aumento de contagios. Por eso es inminente la integración de elementos que no sólo esterilicen superficies, sino también el aire. Esto replantea los sistemas de ventilación natural en los nuevos edificios, sin embargo, el reto se presenta en los edificios actuales en donde la inversión de un cambio de fachadas o sistemas de ventanería implicaría una inversión injustificada y el tiempo para hacerlo es largo, por lo tanto se tiene que pensar en diferentes estrategias.
En este sentido, una posible opción es la integración de iluminación con rayos UV para poder eliminar gérmenes, bacterias y virus del aire sin exponer a los humanos. También existen productos que por medio de rayos FAR-UVC esteriliza superficies y personas sin dañarlos. De este modo, la nanotecnología empieza a tener mayor impacto con productos como el Dióxido de Titanio que sus resultados para la eliminación de virus, bacterias y gérmenes se ha probado en Estados Unidos, Japón y Europa. Se aplica como nano-partículas imperceptibles a la vista, tacto u olfato, que al contacto de la luz natural o artificial esteriliza la superficie. (Para ver más información www.tresismo.com/wellness).
Los profesionales tenemos la obligación de mejorar la calidad de vida de los colaboradores que día a día desempeñan su labor en diferentes espacios de trabajo. En este sentido, la psicología ambiental agrega plusvalía, incrementa el valor de la propiedad, ahorra recursos y los invierte de la manera más eficiente posible para alcanzar esta meta. Como especialistas del diseño, no podemos desaprovechar los m2, debemos asesorar a nuestros clientes, y dar respuesta a sus necesidades en un contexto tan difícil como el que estamos enfrentando.
Suena complicado, cuando piensas en todas las diferentes premisas que presentan los nuevos proyectos, pero cuando estás acostumbrado a navegar entre proyectos tan diferentes (corporativos, institucionales, comerciales, residenciales, usos mixtos, hoteleros) como ha sido la experiencia de TRESISMO, es parte importante otorgar el tiempo requerido a la investigación inicial para cruzar todas las variables y lograr los objetivos. Esto hace que cada proyecto sea siempre un deleite, por su unicidad y por la posibilidad de mejorar la calidad de vida de nuestros clientes y la productividad de sus empresas.
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